Mons. João Clá Dias: ¡Nada trae más felicidad a un alma que devolver a Dios lo que le pertenece!

Ante las falsas apariencias derivadas del orgullo, manifestadas en la hipocresía de los doctores de la Ley, Nuestro Señor Jesucristo nos exhorta a ser sinceramente generosos como la pobre viuda, dando todo de nosotros mismos por amor a Él. […]

Remedio para nuestras miserias y amparo contra las tentaciones

Cuando alguien se entrega a sí mismo, su egoísmo termina siendo sofocado en beneficio de servir a los demás. Servir, ya sea dando un buen ejemplo, un buen consejo o dando alguna ayuda, repara nuestras faltas y al mismo tiempo nos mantiene alejados del pecado. Entonces, una forma de ganar fuerzas para enfrentar la tentación es darnos a nosotros mismos.
Al contrario, quien se encierra en su egoísmo no está preparado para el momento siempre presente de la tentación, ya que nos basta con existir para ser blanco de solicitaciones del pecado, como dice San Pedro: “Sed sobrios y velad. Tu adversario, el diablo, ronda como león rugiente, buscando a quien devorar» (I Pd, 5, 8). […]

Busquemos la felicidad donde ella se encuentra

Nada trae más felicidad a un alma que devolver a Dios lo que le pertenece. La justicia consiste en «dar a cada uno su derecho». [6]

Ahora bien, si vienen de Dios todas las cosas que han sido creadas y están a disposición del hombre, éste es deudor de todo lo que de él recibió. El préstamo forma parte de los acuerdos entre los hombres. El que presta se queda a la espera de la devolución del bien prestado; y quien lo tomó de préstamo tiene obligación de devolverlo al dueño.

Ahora bien, si esto es así en la relación humana, no podemos olvidar: todo lo que tenemos no es sino un préstamo de Dios. Desde nuestra vida, hasta nuestras capacidades y cualidades, pasando por todos nuestros bienes.

Así seremos libres, pues sólo es realmente libre quien es justo, y pone en las manos de Dios todo lo que de Él recibió.

Daría indicios de locura quien, habiendo perdido algo dentro de un teatro, fuera a buscarlo del lado de afuera, alegando que la calle está más iluminada. ¿Y qué hace el mundo actual? Por haberse hundido en el egoísmo, corre detrás de la felicidad donde ella no se encuentra.

Proclamando que la libertad consiste en entregarse a la saña de las pasiones y de las malas inclinaciones, va en busca de la felicidad en el vicio, en el pecado y en cuántas locuras, donde encuentra, no la felicidad, sino la frustración, la depresión y, a veces, las enfermedades. De esa manera, el egoísmo, fustigado por Nuestro Señor en el Evangelio de hoy, ya es castigado aquí en la Tierra, siendo aún merecedor de la pena eterna.

La verdadera alegría está en la generosidad virtuosa, pues es en ella que el hombre cumple completamente su finalidad de «conocer, servir y amar a Dios» en este mundo, de modo a «ser elevado a la vida con Dios en el cielo». [7]

[6] Cf. SANTO TOMÁS DE AQUINO. Suma Teológica. II-II, q.58, a.1.

[7] Compendio del Catecismo de la Iglesia Católica, n.67.

Fuente: Mons. João Clá Dias, EP in “Lo inédito sobre los Evangelios” Vol. II, Editríce Vaticana.

[Mons. João Clá Dias, EP es fundador de los Heraldos del Evangelio]

26 thoughts on “Mons. João Clá Dias: ¡Nada trae más felicidad a un alma que devolver a Dios lo que le pertenece!

  1. Qué gran verdad. Olvidarnos de sí y darnos. Ahí está la paz de alma, la verdadera felicidad. Excelente artículo. Los comentarios de Mons. João Clá son bellísimos!! Gracias. Saludos desde Ecuador.

  2. Que forma más linda de recordarnos, que pertenecemos a Nuestro Señor, y que todo lo que somos es por su bondad, entonces a mostrar gratitud por todo lo que nos ha dado.
    Monseñor nos abre los ojos, nos hace entender, comprender y reaccionar con estas v reflexiones. Más claro , Imposible!
    Entonces a practicar la gratitud y la generoaidad!

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