En el emocionante escenario de los Juegos Deportivos Nacionales, la mente y la estrategia se fusionaron en una batalla de ingenio sobre el tablero de ajedrez. Jugadores de diferentes instituciones y localidades se reunieron en el salón audiovisual de Gral Flores, específicamente en Utu, para competir en una contienda mental que demostró la destreza y el compromiso de los jóvenes ajedrecistas.
En la Categoría 1 varones, Matías Negrín, representante de Plaza de Deportes, se alzó con el primer lugar, demostrando una maestría impresionante en el tablero. Su dedicación y enfoque en el juego le valieron una merecida victoria, consolidándolo como un digno campeón en esta categoría altamente competitiva. Siguiéndolo de cerca, Juan Panizza, del Colegio de Huerto, reclamó el segundo lugar, exhibiendo su habilidad estratégica y su determinación en cada movimiento. Valentín Leleo, también representante de Plaza de Deportes, aseguró el tercer lugar en una demostración asombrosa de agudeza mental y perseverancia. Estos jóvenes talentos nos mostraron que el ajedrez es un deporte de paciencia, concentración y habilidad estratégica.
En la categoría femenina, Maggali Piñero y Milagros Trucido, ambas del Liceo Cardal, dejaron su huella en el torneo. Estas dos prodigiosas jugadoras demostraron su destreza en el tablero y su pasión por el juego, asegurando sus merecidos lugares en el podio. Su dedicación y esfuerzo son un testimonio de la creciente participación y éxito de las mujeres en el mundo del ajedrez. Pia Márquez, representante del Liceo de 25 de Agosto, también se destacó en la Categoría 2 mujeres, asegurando su lugar entre las jugadoras destacadas del torneo.
No podemos dejar de mencionar a los valientes competidores en la Categoría 2 varones. Renato Galárraga, del Liceo Cardal, y Dylan Curbelo, del Liceo 25 de Agosto, demostraron su destreza y habilidad en el tablero de ajedrez, asegurando sus merecidos lugares en esta categoría reñida. Su pasión por el juego y su enfoque estratégico los catapultaron hacia el éxito en una competencia llena de desafíos.
El ritmo del juego también desempeñó un papel crucial en la competición. En la categoría masculina, se utilizó un emocionante formato de 15 minutos más 10 segundos por movimiento, lo que agregó un nivel adicional de intensidad y emoción a cada partida. Por otro lado, en la categoría femenina, el tiempo se ajustó a un control de tiempo de 10 minutos más 10 segundos por movimiento, lo que mantuvo a las jugadoras en constante acción y pensamiento estratégico.
Agradecemos la Información a Gonzalo Pérez que desempeño la tarea de Juez junto a Martin López