El fútbol te llevó por nuevos caminos, pero el destino siempre te trae de vuelta a donde todo empezó.
Santiago Pereira vuelve a vestir la camiseta que ama, la que transpiró desde chico, la que lo vio crecer dentro y fuera de la cancha.
Hoy vuelve más maduro, con experiencia en el fútbol profesional, con hambre de gloria y con el corazón pintado de albiceleste.
Porque los que sienten estos colores… nunca se van del todo.
¡Bienvenido a tu casa, Santi!
La gente, el club y la historia te esperan.
