Por José Ignacio Labandera Angelero
Miguel siempre fue una voz infaltable en la Catedral de Florida. Lo tengo grabado desde chico, cuando iba a misa con mis padres, y él ya estaba ahí, metiendo música a la misa y las distintas celebraciones, como quién riega de a poco el ánimo para todos.
Un día, charlando mano a mano, me comentó que, cuando murió el Padre Matonte -en la ruta que va, de Florida a 25 de mayo, en la famosa “curva de Matonte”, una curva traicionera donde murió -, la comunidad quedó muy triste, y el ánimo estaba por el piso. Y fue entonces que se le pidió a Miguel, y supongo que, a otros referentes, el encargo de levantar el ánimo.
Y fue así que nació el Coro de la Catedral y también gran parte de su trabajo, pensando en su comunidad y la misión que, de alguna manera, Dios le ponía, y que yo desde este lugar le quiero agradecer y que le recuerdo desde muy joven.
Pero resulta que, hace algún tiempo, no sé por qué, ha tenido grandes diferencias con la Iglesia y las hace públicas. La que hizo ruido, y llegó hasta Salto, Paysandú -porque al Diario nos escriben de hasta por allá-, y por gran parte del territorio oriental, es que dijo expresiones como: “¿de qué virgen me hablas?”, y otra: “María creía que su hijo -Jesús- estaba loco” y cosas semejantes.
Terminada la introducción, quisiera responderle a Miguel, pero también darle una respuesta a la comunidad, que queda confundida y que su fe se sacude. Es una respuesta general, porque si respondo cada cosa que dijo, necesito las 24 carillas del diario.
Respondo, porque quiero mucho a la Virgen María, y soy testigo -con conocimiento personal-, de los muchos favores que he recibido de ella. Eso sí: lo suyo es que hablen quienes tienen la posta en estos temas, son las autoridades de la diócesis o de la parroquia.
Primero que nada, Miguel -y que también lo sepa la gente-, me llama la atención que, siendo una tipo que te has dedicado a leer, que te has dedicado a estudiar, que te fuiste a Tierra Santa, es decir, que estás empapado en el tema, estés usando para toda tu argumentación en contra de la Iglesia y de la Virgen, autores protestantes o pura “filología”.
¡Pero mirá vos! ¡Es de no creer! Y, mira que no tengo problema en leer o escuchar otros autores cristianos; al contrario, hay cosas que suman. No es que no se pueda leer autores protestantes. El tema es otro: Si vas a plantarte diciendo que “tenés la verdad” y al final solo diste la mirada protestante… y bueno, es como juzgar un asado habiendo probado solo la ensalada: te faltó lo más importante.
Y, todavía, en la nota con el señor Fabricio, digas que, las argumentaciones sobre la virginidad de María, de parte de la Iglesia, son las que hablan del himen de la Virgen, ¡Por favor, Miguel, que tiene que ver el himen acá! (Por las dudas, himen: tejido vaginal)
Porque siendo sinceros, ahí se notó que no tocaste un solo libro serio sobre María. Ningún autor serio o predicador se pone a hablar del himen de la Virgen María. De verdad que no es nada serio, por supuesto que no es teología, ni la Iglesia se basa en esa barbaridad, ni es objetivo ni neutral. Si solo se lee un tipo de fuente, es lógico terminar con conclusiones así.
Durante la charla, hubo varios palos, como el clásico: “¿por qué los Católicos no estudian la Biblia?”, ¿por qué no se forman?, y varios palitos más…
Ahora… sepan, hermanos Católicos, que no es obligación de ninguno de nosotros ser un biblista, ni un teólogo profesional. Con conocer la fe, alimentarse de la palabra, formarse según el propio estado y –fundamental– no decir disparates sobre la doctrina, alcanza y sobra.
Es más… durante mucho tiempo, la catequesis más grande para las personas que no sabían leer, o que no recibían catequesis, eran las imágenes o pequeñas oraciones. Y aunque parezca chiste, esas personas humildes, que no sabían nada de Biblia, nos pueden dar clase a muchos de qué es una verdadera fe.
Porque ahí está el punto: más allá de “conocer”, “formarse” e intentar trepar la montaña intelectual, hay algo mucho más simple y más duro a la vez: practicar.
Conocer cosas y ser más intelectual lo hace cualquiera.
Practicar… ahí se va achicando la hinchada. ¿Recuerdan cuando el diablo tentaba a Jesús en el desierto? (Mateo 4, 1-11). El diablo tentaba a Jesús con pasajes bíblicos… el diablo un fenómeno para la Biblia; pero sin practicar nada.
Pero ojo con esto… todos nos equivocamos, y la Iglesia no es un museo de santos. La Iglesia es un hospital de pecadores. Yo, el primero, y por eso no me pongo a condenar a Miguel, como ya hizo alguno.
Pero el mejor argumento que da Miguel en contra de María sobre que tuvo más hijos, son en un pasaje bíblico de Isaías 7,14. Según él, está mal traducido; no era que quería decir “una virgen”, sino que en realidad el pasaje bíblico quería decir “una joven”. Entonces, como ahora se dieron cuenta de eso, empezaron a arreglar las biblias en todos el mundo. Eso no pasó. Eso pasa solo en las Biblias protestantes tipo Reina-Valera y algunas otras más. La Biblia Católica es una y no se modifica. Es la misma siempre.
Ese argumento es viejísimo y es un clásico, de personas que quieren desmontar la doctrina mariana. Se apoya en que, la palabra hebrea “almah”, significa “joven mujer” y no dice nada sobre que es virgen. Y como no dice nada de virgen, no lo es.
¿Problema? El problema es que traducen la escritura con intenciones cismáticas, porque los judíos, cuando tradujeron la biblia al griego -antes de Cristo-, en la famosa Septuaginta (72 traductores judíos que se encerraron completamente por separado a pedido del rey y tradujeron exactamente lo mismo, palabra por palabra, toda la biblia y era la traducción que citaba Jesús), tradujeron “almah” como “parthenos”, que significa virgen. Y no tiene más vuelta que eso…
Además… la Iglesia Católica no basa el dogma solo en esa cita, también en el evangelio de Lucas, en la tradición viva (que los protestantes no se basan en tradición, solo en Biblia), en los padres de la Iglesia y el Magisterio. Es un edificio entero.
Pero fíjate esto: si solo vas a hacer “magisterio” con la “filología” (disciplina que analiza las cosas escritas), te quedaste sin Tradición, sin Magisterio, sin padres de la Iglesia, es decir, analizas la fe con solo una pata.
También Miguel menciona otra cita bíblica donde dice los nombres de los hermanos de Jesús: «¿No es éste el carpintero, el hijo de María y hermano de Santiago, José, Judas y Simón? ¿Y sus hermanas no están aquí entre nosotros?» Marcos 6,3
Recomiendo leer las declaraciones del Padre Pablo Enrique Coimbra, refutando a Miguel, que bíblicamente nos muestra de quién es madre cada persona que se menciona la cita.
Otra expresión que dice Miguel, es que “Jesús no trajo dogmas, ni doctrinas, solo hablaba del mandamiento del amor”. Mira… es imposible decir una cosa semejante, el que dice “no tengo doctrina”, ya tiene una… No tener doctrina es una doctrina.
La Iglesia no inventa dogmas porque sí; lo que hace, es justamente custodiar el sentido original para que cada uno no se invente una interpretación.
También Miguel dice: “Jesús no trajo dogmas ni doctrinas” Falso. Jesús enseña con autoridad (Mt 7,28-29), dio mandamientos (Jn 13,34), Jesús corrigió interpretaciones erradas de la Ley, Jesús enseñó cómo vivir, cómo rezar, cómo perdonar, cómo juzgar: ¿y qué es eso? Todo eso es doctrina.
También dijo Miguel: “Jesús no trajo jerarquías” Falso otra vez. Jesús eligió doce apóstoles y puso como cabeza a Pedro (Mt 16,18), y hasta el día de hoy hay una sucesión apostólica desde Pedro hasta León XIV… 267 Papas, no es un detalle.
Miguel también dijo: “Jesús no trajo templos ni dijo que se rezara adentro”. Esto también es falso. ¿Recuerdan cuando Jesús sacó a los mercaderes del templo con látigos y los echo a todos y dijo: “Quitad esto de aquí; no hagáis de la casa de mi Padre una casa de comercio.”? Juan 2, 14-17. Y termina la cita diciendo que los apóstoles se acordaron del pasaje “El celo por tu casa me devorará.”. ¿La casa, de quién? Era la casa de su Padre, un lugar sagrado.
Miguel también dijo: “Las apariciones de la Virgen son a indiecitos, a niños ignorantes… nunca hay una aparición entre gente mayor y que se haya podido fotografiar. Nunca hay una imagen, ¿por qué no se aparece frente a 80 mil personas y se terminaba todo el misterio?”
Totalmente falso, ¿acaso no hemos visto los milagros que pasan, por ejemplo, con la Virgen de Guadalupe? ¿No hemos visto la cantidad de milagros despampanantes que pasan con las apariciones marianas? Entre ellos, el Premio Nobel de Medicina Alexis Carrel, que llevó a una paciente moribunda, -ha pedido de ella-. ¿Presenciando el milagro de una sanación de una peritonitis tuberculosa feroz y ahí se convirtió?
Miguel se pregunta en la nota: “¿Por qué no se aparece frente a 80 mil personas y se terminaba todo el misterio?” Falso de vuelta, y demuestra que no ha conocido aún lo más básico de María. Uno de los milagros más grandes del siglo XX, es el milagro del sol, frente a unas 50-80 mil personas en Fátima un 13 de octubre de 1917. Salió en la prensa, hay testimonios escritos por doquier, diarios de la época relatando el hecho, hay registro fotográfico; fue gente agnóstica, de sectas, protestantes, Católicos… de todo. y todos vieron lo mismo. (La foto de esta columna, es una foto de ese acontecimiento de aquella época).
En fin, se comentaron en la nota muchas cosas más, no puedo mencionarlas todas. Pero al escuchar a Miguel hablando del himen de María, y despues decir “por qué no hay milagros frente a gente mayor, solo a niños ignorantes”, ahí me queda claro el asunto, que lo que se plantea no nace de un verdadero deseo de descubrir las cosas. Porque, si uno quiere encontrar la verdad, busca autores en serio y se alimenta bien de todo antes de sacar una conclusión.
Pero más allá de una discusión, creo que las puertas de la Iglesia Católica están abiertas para todos, y la intercesión de la María Santísima también, hoy en especial por todos nosotros para que encontremos a Dios en nuestra vida.
Yo hoy, rezo por Miguel. Porque, a pesar de lo que considero un error, también he visto la gran persona que ha sido: el tiempo que dejó, el esfuerzo, el dinero, alguna humillación que se habrá comido, las muchas veces que no se le valora las buenas acciones. Todo eso vale, y vale mucho.
Por eso, me gustaría que volviera a ser un hermano en la fe.

Gracias nacho
Muchas gracias por tu nota !!!!
Ánimo
Recemos por todos los Miguel que con mucho dolor intentan aclarar su fe ensuciando nuestra Santa y Pecadora Iglesia…!!
Excelente nota ,hombre de fe . Impecable toda la aclaración!!!