Con un emotivo acto protocolar que reunió a autoridades nacionales y departamentales, docentes, estudiantes, exalumnos y familias, la Escuela Técnica Superior de Florida celebró su centenario. La institución reafirmó su papel como referente educativo y social, y como símbolo de identidad para varias generaciones de floridenses.
Redacción de Cambios
La UTU de Florida cumplió este jueves 100 años de trayectoria, consolidándose como una de las instituciones educativas más emblemáticas del departamento. El acto oficial se llevó a cabo en la sede del centro de estudios técnicos, con la presencia de autoridades nacionales y departamentales, así como de representantes de la comunidad educativa, exalumnos, docentes en actividad y jubilados, familias y vecinos.
La jornada estuvo marcada por la emoción, los recuerdos y también por una fuerte mirada hacia el futuro. La directora actual de la institución, Estela Ochotorena, expresó en su discurso que “el esfuerzo, la solidaridad y la responsabilidad han acompañado a nuestros egresados generación tras generación”. Enfatizó la importancia de que los estudiantes comprendan que “esta escuela es de ustedes, cuidarla, defenderla y hacerla crecer es parte de su derecho y de su responsabilidad”.
Ochotorena también hizo un llamado a las autoridades a seguir apostando a la educación como herramienta de transformación social, subrayando que “invertir en la educación técnica es apostar al desarrollo tecnológico, a la innovación y a la formación de ciudadanos capaces de enfrentar los desafíos del futuro”.
Uno de los momentos más emotivos de la ceremonia fue el discurso de la exdirectora Patricia Soca, quien compartió una mirada íntima y personal sobre lo que significó la UTU en su vida. Recordó sus días como estudiante y luego sus más de tres décadas como docente, relatando con nostalgia episodios que marcaron generaciones: las tradicionales gincanas estudiantiles en la plaza, las tortas gigantes elaboradas por los cursos de gastronomía y los viajes de los cursos de turismo y administración, donde estudiantes y profesores compartían aprendizajes y vivencias inolvidables.
“Esta escuela me enseñó que la educación no es solo transmitir conocimientos, sino sembrar valores, acompañar procesos y abrir puertas”, señaló Soca con emoción. Y agregó: “Aquí encontré colegas que se convirtieron en amigos, alumnos que me dejaron enseñanzas imborrables y familias que confiaron en nosotros lo más valioso: sus hijos”.
La celebración contó además con la presentación especial de la Banda Sinfónica Juvenil, organizada por la Intendencia de Florida a través de la Dirección de Cultura, encabezada por Adela Dubra, quien junto a su equipo acompañó el festejo en nombre del gobierno departamental. La comuna transmitió su saludo institucional a la UTU en este aniversario, destacando su aporte a la formación de técnicos, profesionales y ciudadanos comprometidos con la comunidad.
La conmemoración no solo fue un espacio para el reconocimiento y la memoria, sino también para la reafirmación del rol que la UTU de Florida tiene en la vida del departamento. Desde sus inicios, la institución ha formado a miles de estudiantes en diversas áreas, adaptándose a los cambios tecnológicos, sociales y laborales de cada época. En palabras de Ochotorena, “lo que hemos construido en estos 100 años nos enorgullece, pero también nos impulsa a mirar hacia adelante con esperanza”.
El centenario dejó en claro que la UTU es mucho más que un centro de enseñanza: es un espacio de encuentro comunitario, un símbolo de pertenencia y un faro educativo que ha marcado profundamente la historia colectiva de Florida. Con nuevas generaciones ingresando cada año y con el compromiso renovado de docentes, autoridades y familias, la institución proyecta su labor hacia el futuro, manteniendo viva la esencia de un lugar donde la educación transforma vidas.






