En un dramático episodio frente al Juzgado Penal de la calle Rivera en Florida, Fernando Clavijo, de 36 años de edad, se encadenó en un intento desesperado por reclamar el derecho de ver a su hijo de 7 años. La situación se desencadenó a raíz de una medida judicial de restricción de acercamiento que ha mantenido separado al padre de su hijo durante los últimos 5 meses.
La medida de restricción no solo afecta a Fernando Clavijo, sino también a su ex pareja, quien lo denunció por violencia de género en el pasado. Según Clavijo, las denuncias han sido utilizadas como un escudo, resultando en la separación prolongada de padre e hijo.
A pesar de su intento inicial de encadenarse como protesta, Clavijo desistió de su actitud poco después. Un funcionario policial intervino, conversó con él y, tras una breve reunión con la jueza, Clavijo se retiró del lugar.
En una entrevista posterior, Clavijo expresó su angustia y frustración. Afirmó que ha estado luchando contra la medida de restricción, impuesta inicialmente por decisión de su ex pareja. Según él, la jueza extendió la restricción por seis meses adicionales, privándolo de la oportunidad de ver a su hijo.
Clavijo argumenta que no representa ninguna amenaza para su hijo y critica el manejo de su caso por parte de la jueza, destacando inconsistencias en las declaraciones de la madre. Además, señala que las denuncias de violencia de género en su contra se basan en situaciones malinterpretadas, como un audio en el que hablaba fuerte pero sin faltar al respeto.