Con la llegada de los primeros fríos, los hogares comienzan a encender sus estufas para combatir las bajas temperaturas. Sin embargo, esta práctica trae consigo un riesgo significativo: el mal manejo de las cenizas generadas. En los últimos días, se han reportado varios incidentes de incendios en contenedores de basura debido a cenizas que no estaban completamente apagadas.
Las autoridades locales instan a la población a tomar precauciones adicionales al desechar las cenizas de sus estufas. Es esencial verificar que las cenizas estén completamente frías antes de arrojarlas en los contenedores. El contacto de cenizas calientes con otros materiales inflamables puede provocar rápidamente un incendio, poniendo en peligro tanto a las personas como a los bienes materiales.
Para prevenir estos incidentes, se recomienda depositar las cenizas en recipientes metálicos con tapa y dejarlas reposar al menos 48 horas antes de desecharlas. Además, es aconsejable mojar las cenizas para asegurarse de que no queden brasas activas.
La colaboración de todos es crucial para evitar estos peligrosos incendios. Siguiendo estas simples recomendaciones, se puede disfrutar del calor de las estufas sin comprometer la seguridad de la comunidad.
La siguiente foto es de un contenedor incendiado en la calle Sierra e Independencia de la ciudad de Florida:
Este incidente es un recordatorio de la importancia de manejar adecuadamente las cenizas para prevenir futuros incendios.
Agradecemos a suscriptor por la imagen