En una medida polémica, el Gobierno argentino encabezado por Javier Milei ha anunciado la prohibición del lenguaje inclusivo en todas las comunicaciones emitidas desde la administración pública nacional. Esta decisión, anunciada por el portavoz presidencial Manuel Adorni, tiene como objetivo eliminar expresiones como la arroba, la x y la e, así como la inclusión innecesaria del femenino en documentos oficiales.
La iniciativa, que inicialmente fue implementada por el Ministerio de Defensa durante el gobierno kirchnerista anterior, se extenderá ahora a todos los organismos estatales. Según Adorni, esta medida busca promover el uso de la lengua castellana como el lenguaje que “contempla todos los sectores”.
El Gobierno actual considera que las disquisiciones sobre la idoneidad del lenguaje inclusivo son parte del negocio político y ha decidido no intervenir en este debate. Adorni expresó que “es un debate en el que nosotros no vamos a participar porque consideramos que las perspectivas de género se han utilizado como negocio de la política”.
Cabe destacar que el lenguaje inclusivo fue defendido por el presidente anterior, Alberto Fernández, y fue incorporado en las comunicaciones públicas del Ministerio de las Mujeres, Género y Diversidad, el cual ha sido eliminado por el actual Ejecutivo.
Esta medida ha generado controversia y ha avivado el debate sobre el uso del lenguaje inclusivo en la esfera pública, con posturas encontradas entre quienes consideran que promueve la igualdad y quienes lo ven como un aspecto del lenguaje que debe ser abolido.