Uruguay Crece Contigo celebró el Mes de la Primera Infancia en el Estadio 10 de Julio con una jornada interactiva para toda la familia.
Bajo el lema “Tres millones cuidamos a treinta mil”, el programa Uruguay Crece Contigo del Ministerio de Desarrollo Social (MIDES), junto con el Instituto Nacional de Alimentación (INDA), celebró en Florida el Mes de la Primera Infancia con una feria interactiva en el Estadio 10 de Julio. La propuesta reunió a decenas de familias en un ambiente lúdico, educativo y participativo, con el objetivo de visibilizar el trabajo cotidiano que realizan los equipos de primera infancia en todo el país.
Daniel de León, coordinador regional del Mides, destacó la importancia de este tipo de instancias:
“Es una forma muy interesante de mostrar los niveles de coordinación del programa. En Florida trabajamos con unas 30 familias, mamás con sus hijos. Para el MIDES y el Ministerio de Salud Pública, este es un trabajo fundamental: atender la primera infancia desde el día cero es una política de Estado”.
Durante la jornada participaron los equipos locales de Uruguay Crece Contigo, los centros CAIF, y un policlínico móvil que recorre el país brindando atención a embarazadas, niños y niñas pequeñas.
Javier Trujillo, integrante de Uruguay Crece Contigo, explicó que mayo se celebra desde hace años como el Mes de la Primera Infancia:
“Promover actividades que favorezcan el desarrollo y el crecimiento desde los primeros años es clave. Decimos que la primera infancia es para siempre, porque marca muchas dimensiones del futuro de cada persona”.
El especialista remarcó que el trabajo con la infancia comienza incluso antes del nacimiento, desde el embarazo, con acciones vinculadas a la alimentación, el cuidado y la estimulación temprana:
“El juego, el canto, la lectura y el diálogo son elementos fundamentales tanto para valorar como para promover el desarrollo a lo largo de toda la infancia”.
El evento permitió a las instituciones educativas y de salud salir del entorno habitual y compartir con la comunidad su labor cotidiana. Además, generó espacios de intercambio entre profesionales y familias, fortaleciendo la red de apoyo que sostiene el crecimiento saludable de niñas y niños.


