La ceremonia se realizó en la plaza Henry Dunant. La presidenta Doris Fleitas remarcó el compromiso de la institución con la paz, el diálogo y el trabajo territorial para enfrentar la violencia cotidiana.
Con un acto sencillo pero lleno de sentido, la Cruz Roja Filial Florida conmemoró este miércoles los 128 años de la institución en Uruguay. La cita fue en la plaza que lleva el nombre de Henry Dunant, fundador del Movimiento Internacional de la Cruz Roja, donde se recordó su legado y se reafirmaron los valores que siguen guiando su acción: humanidad, imparcialidad, neutralidad, independencia, voluntariado, unidad y universalidad.
La presidenta de la filial local, Doris Fleitas, encabezó la actividad y habló con emoción del presente de la Cruz Roja. “Hoy celebramos un día muy especial, pero también reflexionamos sobre el momento que estamos viviendo como sociedad. Hay un cambio profundo, y lamentablemente, no siempre hacia lo mejor. Estamos cada vez más violentos, incluso con nosotros mismos”, expresó.
Fleitas remarcó que uno de los principales objetivos de este año es trabajar para combatir la violencia desde sus raíces, empezando por la forma en que nos relacionamos. “Si alguien te dice algo que te molesta, lo primero que hacemos es reaccionar mal, ir contra esa persona. Lo que necesitamos es detenernos, respirar, y pensar. Es difícil, pero es posible”, señaló.
Como parte de esa estrategia, Cruz Roja Florida comenzó a reunirse con las fuerzas vivas de cada barrio, en busca de espacios de diálogo y colaboración. El próximo encuentro será el 14 de mayo con vecinos del Prado Español, donde se espera identificar temas sensibles y formas concretas de intervenir.
Durante la jornada también se instaló una muestra itinerante que recorre la historia de la Cruz Roja en Uruguay, una de las organizaciones civiles más antiguas del país. Fotografías, documentos y referencias a su accionar en conflictos bélicos y desastres naturales fueron parte del recorrido visual y reflexivo.
Uno de los oradores del acto, Marcos Pérez, valoró especialmente el papel de Henry Dunant como figura clave del derecho humanitario. “No solo fue el creador de la Cruz Roja, también inspiró la primera Convención de Ginebra de 1864, donde se propuso por primera vez proteger al herido sin importar el bando. Esa idea fue creciendo, sumando otras convenciones, y hoy se traduce en normas que ponen humanidad incluso en los conflictos más crueles”.
Pérez destacó que, aunque hoy Uruguay vive en paz, el espíritu de Dunant sigue siendo necesario. “Aquí donde hace mucho no empuñamos un arma, todavía hay batallas por librar: contra el dolor, contra la pobreza, contra el olvido del otro. Y allí siempre hay alguien de Cruz Roja dispuesto a tender una mano”.
La celebración de los 128 años fue también una oportunidad para agradecer a los voluntarios, que con compromiso silencioso sostienen la labor humanitaria todos los días. Como dijo Fleitas al cerrar: “La Cruz Roja no es una oficina. Es una forma de estar en el mundo, con respeto, con entrega, con esperanza”.
