La turbonada del pasado martes a la noche también provocó daños en el Hipódromo Irineo Leguisamo. Arboles caidos por doquier, el disco o sentencia literalmente quebrado, el cartel del Sint en el suelo y el aparato que sostiene los números del marcador tambien con averías.
Lamentablemente daños por todos lados y el hipódromo no se salvó de las ráfagas de viento y lluvia.