Gustavo Salle y su hija Nicolle presentan proyectos que buscan garantizar la libre elección parental y modificar el carné de salud laboral.
El partido Identidad Soberana, representado por el abogado Gustavo Salle y su hija, la diputada Nicolle Salle, ha generado un intenso debate en el ámbito político y social con la presentación de dos proyectos de ley que buscan modificar aspectos clave de la política sanitaria en Uruguay. El primero propone garantizar el derecho de los padres a decidir libremente sobre la vacunación de sus hijos, mientras que el segundo busca eliminar el carné de salud laboral, reemplazándolo por un sistema voluntario de control.
El proyecto sobre vacunación fue ingresado a la Cámara de Representantes el pasado martes 18 y será estudiado por la Comisión de Salud Pública y Asistencia Social. La iniciativa busca reafirmar el derecho fundamental de los padres a tomar decisiones médicas sobre la salud de sus hijos, asegurando el consentimiento informado como requisito indispensable y prohibiendo cualquier tipo de coerción estatal o privada.
Según la exposición de motivos presentada por Identidad Soberana, “el presente proyecto tiene como finalidad garantizar la libre elección en materia de vacunación, asegurando el consentimiento informado en todo procedimiento médico y evitando cualquier tipo de coerción”. Los legisladores destacan que en los últimos años se han reportado casos donde se intentó imponer la vacunación sin considerar el derecho parental, lo que ha generado conflictos legales y vulneraciones a derechos fundamentales.
La propuesta también hace referencia al caso judicial de la niña Ámbar, donde la Justicia exigió la vacunación bajo riesgo de que sus padres perdieran la patria potestad. Identidad Soberana califica este fallo como un “retroceso jurídico” y subraya que “ignora décadas de avances normativos y el reconocimiento internacional del consentimiento informado como principio rector en intervenciones médicas”.
Entre los puntos más controversiales del proyecto, se establece que “ninguna institución pública o privada podrá condicionar el acceso a derechos o servicios a la presentación de certificados de vacunación”. Además, se propone la derogación total de cualquier disposición legal que establezca la vacunación como obligatoria, argumentando que la actual legislación y decretos vigentes han sido tácitamente derogados por la ley general de derechos de los pacientes.
La iniciativa también aborda la falta de transparencia en el sistema sanitario, señalando que “no existe un rastreo proactivo para detectar posibles efectos adversos en la población” debido a la vacunación. “La omisión de estudios que podrían arrojar luz sobre una posible relación entre la vacunación y muertes infantiles refuerza la preocupación por la falta de transparencia y la negligencia en la vigilancia sanitaria”, señala el documento presentado por los legisladores.
En paralelo, Identidad Soberana presentó un segundo proyecto que busca modificar el actual sistema del carné de salud laboral. Según la diputada Nicolle Salle, el nuevo sistema propuesto reemplazaría el carné obligatorio por un “Sistema de Control de Salud Voluntario”. Este sistema permitiría a los trabajadores acceder voluntariamente a exámenes médicos específicos para su actividad laboral, dentro del marco del Plan Integral de Atención en Salud.
La exposición de motivos de esta propuesta sostiene que el sistema actual “impone exámenes de salud generalizados sin una justificación técnica específica, lo que resulta en una carga innecesaria para los trabajadores y una violación de los principios fundamentales de autonomía, soberanía y libertad sobre el propio cuerpo”. Además, se busca eliminar la exigencia del carné como requisito para la contratación o permanencia en el empleo, asegurando así una mayor libertad para los trabajadores.
Estas propuestas han generado reacciones encontradas en el ámbito político y social. Mientras algunos sectores apoyan la idea de proteger la autonomía parental y personal en decisiones médicas, otros advierten sobre los riesgos que podría implicar una disminución en las tasas de vacunación y un debilitamiento en los controles sanitarios laborales.
El proyecto sobre vacunación y el cambio en el carné de salud laboral abrirán un debate crucial sobre la autonomía parental, el consentimiento informado y la gestión sanitaria en Uruguay, temas que polarizan tanto a expertos como a la sociedad.
Fuente: Montevideo Portal