El sábado pasado nos reunimos en la Casa de Retiros «Jesús Buen Pastor» para la 1ra. Jornada Diocesana de Comunicación.
Fue un primer encuentro «cara a cara» para nutrirnos de reflexiones, prácticas comunicacionales, experiencias y animarnos a asumir los desafíos del anuncio de Evangelio en un cambio de época, acelerado por las TIC (Tecnologías de Información y Comunicación). En los últimos sábados hemos vivido momentos de encuentro como el de Catequesis en Sarandí Grande y el de ABP en Florida. En este encuentro nos dimos cuenta de la transversalidad de la comunicación, como un servicio tanto para la Catequesis, la ABP, la celebración y cualquier otra acción pastoral que surja de las comunidades.
Mons. Heriberto reflexionó sobre aspectos de comunicación interna y externa y su experiencia en un canal de YouTube cuyos contenidos comparte en redes sociales. Hizo referencia al cambio tecnológico acelerado de las últimas décadas, por la que pasamos del mimeógrafo a las redes sociales. Insistió en la importancia del lenguaje no verbal al preguntarnos por ¿CÓMO ANUNCIAR? en nuestras realidades concretas.
En el análisis del modo de comunicar de Jesús refirió a la cultura oral de aquellos tiempos y cómo por medio de refranes, parábolas y repetición lograba que sus destinatarios memorizaran su Palabra. Jesús comunica su propia persona y el encuentro con Él es obra de la gracia y de la disposición de la persona para recibirlo.
La comunicación, siguiendo el modelo de Jesús, debe proponer y facilitar ese encuentro en medio de una «selva mediática» donde sembramos la semilla del Evangelio.
¿Qué podemos aportar? El testimonio del encuentro. Puso como ejemplo a Chiara Lubich, fundadora de los Focolares y sus prácticas comunicacionales telefónicas, las grabaciones de sus palabras y posterior difusión.