A cincuenta días del inicio de las primeras evacuaciones, la situación en Cerro Largo continúa siendo crítica debido a las inundaciones persistentes. Según el último informe del Centro Coordinador de Emergencias Departamentales (Cecoed), dirigido por Alejandra Rivero, todavía hay 107 personas que no han podido regresar a sus hogares, entre ellos 36 evacuados y 71 autoevacuados.
Las inundaciones, que han afectado principalmente a las zonas cercanas a la laguna Merín y el río Yaguarón, han provocado un aumento del nivel del agua en estos cuerpos, aunque recientemente se reportó una ligera disminución. A pesar de esto, los niveles todavía se mantienen por debajo de las cotas de seguridad, lo que ha impedido el retorno de los desplazados a sus hogares.
La coordinadora del Cecoed ha informado que el río Yaguarón mostró un incremento de su nivel en los últimos días, aunque se ha estabilizado recientemente. La situación ha requerido una respuesta coordinada de varias agencias, incluyendo la Intendencia, los bomberos, la policía, el ejército y los ministerios correspondientes.
Las inundaciones no solo han desplazado a numerosas personas, sino que también han impactado severamente la producción agrícola y pecuaria de la región. Cultivos de verano como la soja, el arroz, el maíz y la caña de azúcar han sufrido daños significativos, al igual que la fruticultura, especialmente los cítricos que están en plena zafra de cosecha.
En respuesta a las dificultades que enfrentan los afectados, la UTE ha anunciado un descuento del 10% por cada día de interrupción del servicio eléctrico, así como la extensión del vencimiento de las facturas y la reconexión del servicio sin cargo adicional. Estas medidas buscan aliviar la carga sobre los residentes afectados mientras continúan las labores para controlar y mitigar los efectos de las inundaciones en la región.