Servando Echeverría: El Estado contra Martín Fierro.

Homicidio – Juicio en rebeldía. Informe de fiscalía:
Proceso en rebeldía en virtud que el imputado ha fugado, desconociéndose su paradero, por lo que esta Fiscalía analizará los hechos, y arribará al dictamen que se dirá, de acuerdo a la versión del imputado levantada y agregada a este expediente por el Sr. José Hernández, escrita en cuarteta con pormenorizado detalle de los hechos. Por tanto, esta fiscalía dará por verdadera dicha declaración.
LOS HECHOS: Fierro se encontraba alcoholizado y deliberadamente provocó a una pareja de negros que ingresó al local bailable. Primera provocación: “va-ca-yendo gente al baile”; por respuesta la mujer respondió “más vaca será tu madre”. Segunda provocación: “me gusta pa la carona”, insinuando el deseo de tener relaciones sexuales con ella. Tercera provocación: “a los negros los hizo el diablo para tizón del infierno.” Cuarta provocación: “me acerqué (al negro) y “le dije presto: po-r-rudo que un hombre sea…”Estas provocaciones dieron motivo para que el compañero de la negra agredida verbalmente, interviniera y rabioso dirigiéndose a Fierro lo llamó “guacho rotoso”.Este es momento que comienza el ataque físico, iniciativa tomada por Fierro quien le dio un golpe con un porrón de ginebra. Hasta este instante la cuestión era meramente verbal, pero el negro al recibir el golpe reaccionó extrayendo un cuchillo (“pelando el envenenado”) atacando a su provocador. Así comenzó el duelo criollo con varios “tiros” (puñaladas) entre ambos sin acierto.Fierro le dio un “planazo” en la cabeza, es decir con el costado, parte plana, del cuchillo, haciéndolo sangrar. Por su parte el negro le provocó una herida en una mejilla (“carrillo”). Aquí el duelo reviste toda la expresión feroz entre dos hombres diestros en el manejo del cuchillo, uno alcoholizado y el otro ofendido por el agravio a su pareja y discriminado por el color de su piel.Finalmente muere el negro (“tiró unas cuantas patadas y ya cantó pal carnero”), y Fierro se retiró del lugar del hecho (“monté despacio y salí al tranco pal cañadón”). La negra descontrolada emocionalmente “empezó a bramar como una loba”, Fierro intentó “darle una soba” (golpiza) pero no lo hizo por respeto al difunto.Hasta aquí el relato del imputado Martín Fierro, mediante escrito presentado por José Hernández, del cual esta Fiscalía extractó exclusivamente lo relativo al hecho violento que finalizó con un muerto, que es lo relevante en cuanto a la imputación.
CONSIDERANDO: 1) Las provocaciones verbales las inició exclusivamente Martín Fierro demostrando una profunda discriminación racial y jactancia por la gordura de la mujer.2) Quien tuvo la primera reacción física violenta fue el victimario mediante un golpe con un porrón de ginebra al negro.3) Como reacción el negro agredió con un cuchillo y así dio comienzo al duelo criollo. La primera herida fue por golpe de puñal, un “planazo” dado al negro que provocó gran sangrado.
ATENTO: 1) Que Fierro estaba alcoholizado y venía con un profundo resentimiento por las injusticias a que fue sometido.
2) Que el matador tuvo momento suficiente para detener su agresión verbal cuando se burló de la negra tratándola de vaca y ella lo miró como a un perro, pero igualmente continuó provocándola expresando su deseo de llevarla a la carona.
3) Que posteriormente también tuvo oportunidad de evitar la pelea con el negro, pero actuó en contrario, al verlo juntando rabia lo provocó (“po-r-rudo…) y este reaccionó iniciándose el duelo.
4) Que se aprecia que el homicida buscó el final sangriento y lo obtuvo; se estabilizó emocionalmente cuando lo vio en agonía y luego muerto, montando despacio (tranquilamente) su redomón y se marchó.
5) Que de acuerdo a la declaración aportada por Hernández, el matador tuvo un arrepentimiento sugerido en dos momentos: no olvida la agonía y que no hubiera sido sepultado tendiendo la intención (a veces) de llevarlo al camposanto.
ESTA FISCALÍA RESUELVE:
Declarar al Sr. Martín Fierro culpable por el delito de homicidio especialmente agravado quien deberá cumplir una pena de cinco años de cárcel efectiva.Elévese al Juzgado competente.
Firmado: EL FISCAL

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