Habían rezado públicamente por el obispo Álvarez, detenido por el régimen de Ortega desde agosto de 2022. Se eleva a seis el número de sacerdotes arrestados por la policía en la última semana
L’Osservatore Romano
La policía detuvo ayer a monseñor Carlos Avilés y al padre Héctor Treminio, vicario general y ecónomo respectivamente de la diócesis de Managua.
Según fuentes locales, los dos sacerdotes fueron detenidos después de que rezaran por Monseñor Rolando José Álvarez Lagos, obispo de Matagalpa y administrador apostólico de la diócesis de Estelí, condenado a 26 años de cárcel, sin el debido proceso, acusado de conspiración, difusión de noticias falsas, obstrucción a la justicia y desacato a las autoridades. Monseñor Álvarez se encuentra en prisión desde el pasado mes de febrero, tras permanecer en arresto domiciliario desde agosto de 2022.
Con Monseñor Avilés y el Padre Treminio, suman seis los sacerdotes detenidos en Nicaragua en la última semana. El 20 de diciembre, la policía había detenido a otro obispo, Monseñor Isidoro del Carmen Mora Ortega, titular de la diócesis de Siuna. Según la prensa local, también fue detenido por haber rezado públicamente por Monseñor Álvarez durante una homilía. Junto con Monseñor Mora, también fueron detenidos los seminaristas Alester Sáenz y Tony Palacio.